Música - 30 Años sin John Lennon

Pequeño homenaje a un músico descomunal

Tal día como hoy, hace ya treinta años, moría asesinado John Lennon a manos de un supuesto seguidor suyo, Mark David Chapman, al que poco antes había firmado un disco.Su figura fue siempre controvertida. Víctima de una infancia durísima en la que sufrió el abandono de su padre y la lejanía de su madre (se crió con su tía), pronto se convirtió en un "bad boy" en el instituto a la vez que demostraba en su primer grupo, "The Quarrymen", un talento innato para la música. Durante un concierto en la iglesia de Saint Peter de Liverpool, muy cerca de Mainlove Avenue, dónde vivía Lennon, conoció a Paul Mc Cartney y ambos comenzaron a tocar juntos. Poco después se unirían George Harrison, Stuart Stutcliffe y Pete Best, si bien los dos últimos abandonaron el barco tras el periplo por Hamburgo, siendo sustuido Best en la batería por Ringo Starr.

Durante la época "Beatles", los "Fab-Four" revolucionaron el panorama de la música moderna para siempre con sonidos, imágenes y actitudes impropias de la época. No sólo crearon involuntariamente el fenómeno fan, sino que su "Sgt. Pepper´s Lonely Heart Club Band" marcó un antes y un después en la música moderna al llevar al límite al rock, agregando orquestaciones, instrumentos hindúes, grabando pistas al revés e incluyendo, incluso, sonidos de animales. Lo de "A day in the life", por ejemplo, es una bendita locura. Además, se emplearon técnicas de grabación desconocidas hasta aquel entonces. Ya en solitario, John Lennon firmó otros discos extraordinarios con temas brillantes como "Imagine", "Working class hero", "Mother", "Starting over", "Watching the wheels" o "Jealous guy" entre otros. 

Pero no sólo destacó John Lennon por su aportación musical, sino que durante la década de los 70 se convirtió en un activista por la paz, lo que le llevó a "encamarse" dos veces junto a Yoko Ono. La primera en 1969, en el Amsterdam Hilton Hotel, y la segunda, con cámaras incluídas, en el hotel Queen Elizabeth de Montreal. Fue beligerante contra la Guerra de Vietnam, lo que hizo que el presidente Nixon tratara de deportarle varias veces, y se posicionó contra el gobierno de Inglaterra tras la matanza del "Bloody Sunday" de 1972. No fue la primera vez que tuvo problemas con su propio estado, ya que Lennon devolvió su Medalla de Miembro de la Orden del Imperio Británico en septiembre de 1969, cuatro años después de recibirla, a través de una carta dirigida a la propia Reina de Inglaterra. El músico tomó esta decisión por la implicación de Reino Unido en la guerra de secesión de Biafra, por el apoyo del Gobierno británico a la invasión estadounidense de Vietnam y por la censura impuesta a su canción 'Cold Turkey', debido a las referencias a las drogas que incluía. Sin pelos en la lengua, Lennon se metió en todo tipo de charcos durante aquella época, lo que le hizo granjearse numerosos enemigos.

Para muchos un visionario, un líder capaz de movilizar masas a partir de su música, un pacifista de pro. Para otros una persona con problemas con las drogas, tendente a meterse en demasiados líos, un charlatán que hablaba demasiado. Probablemente haya algo de cierto en ambas corrientes. Yo tiendo a pensar que John Lennon era un ser humano, con sus virtudes y defectos, con sus cosas buenas y malas, todo magnificado por su carácter público. En lo que todos coincidimos es en que fue un músico descomunal, un artista muy grande, que nos ha dejado muchas de las mejores canciones del siglo XX. Entre mis favoritas están las tres que os dejo, "Strawberryfields forever", "Across the Universe" y "Watching the wheels".

¡Qué las disfrutéis!